Relaciones de los policultivos
En este capítulo, exploramos las relaciones entre las plantas en un sistema de policultivos, como aprovechar estas interacciones para promover la salud y la productividad del conjunto. La comprensión de estas relaciones nos permitirá diseñar policultivos más resilientes y equilibrados, en línea con los principios de la permacultura.
Complementariedad: Las plantas pueden complementarse entre sí en términos de sus necesidades y características. Al combinar especies con diferentes requisitos de luz, agua y nutrientes, podemos aprovechar mejor los recursos disponibles. Aprenderemos a seleccionar plantas que se beneficien mutuamente, creando asociaciones beneficiosas que promuevan el crecimiento y la protección contra plagas y enfermedades.
ejemplos
1. Maíz, frijoles y calabazas (las Tres Hermanas): Esta combinación tradicional de cultivos indígenas es un ejemplo clásico de complementariedad. El maíz proporciona un soporte vertical para que los frijoles trepen, los frijoles aportan nitrógeno al suelo y la calabaza cubre el suelo, lo que ayuda a suprimir las malas hierbas y retiene la humedad.
2. Cebollas y zanahorias: Las cebollas alejan las plagas como las moscas de la zanahoria, mientras que las zanahorias ayudan a repeler las moscas de la cebolla. Además, las zanahorias tienen raíces más delgadas, lo que facilita el crecimiento de las cebollas.
3. Albahaca y tomates: La albahaca emite un aroma que repele a los insectos dañinos para los tomates, como los pulgones y los gusanos del tomate. Además, algunos jardineros creen que la albahaca mejora el sabor de los tomates cuando se cultivan juntos.
4. Girasoles y pepinos: Los girasoles proporcionan sombra y estructura vertical para que los pepinos trepen. Además, los girasoles atraen a las abejas y otros polinizadores, lo que beneficia la polinización de los pepinos y aumenta la producción de frutos.
5. Lechugas y rábanos: Las lechugas crecen rápidamente y proporcionan sombra al suelo, lo que beneficia a los rábanos que prefieren condiciones más frescas y sombreadas. Además, los rábanos pueden ayudar a romper el suelo compactado, lo que beneficia el crecimiento de las lechugas.
Estos son solo algunos ejemplos de cómo las plantas pueden complementarse entre sí en un policultivo. La combinación adecuada de plantas puede ayudar a aumentar la salud del suelo, reducir las plagas y mejorar el rendimiento de los cultivos.
Simbiosis: Las relaciones simbióticas entre las plantas y otros organismos pueden ser de gran beneficio para el sistema policultivo. Estudiaremos ejemplos de simbiosis, como la asociación de plantas con microorganismos beneficiosos en las raíces, que pueden ayudar en la fijación de nitrógeno, mejorar la absorción de nutrientes y aumentar la resistencia a enfermedades. También exploramos la simbiosis con insectos polinizadores y depredadores de plagas.
ejemplos
La simbiosis en la permacultura se refiere a la relación mutuamente beneficiosa entre diferentes organismos. Aquí tienes algunos ejemplos de simbiosis en un sistema de policultivo:
1. Micorrizas y plantas: Las micorrizas son hongos beneficiosos que establecen una relación simbiótica con las raíces de las plantas. Los hongos micorrícicos ayudan a aumentar la absorción de nutrientes, especialmente fósforo, por parte de las plantas, mientras que las plantas proporcionan carbohidratos a los hongos. Esta simbiosis es común en muchos cultivos, incluyendo árboles frutales, hortalizas y plantas perennes.
2. Abejas y flores: Las abejas y otros polinizadores tienen una relación simbiótica con las flores. Las abejas buscan néctar y polen en las flores para su alimentación, a su vez transfieren polen de una flor a otra, lo que permite la polinización y la reproducción de las plantas. Las plantas dependen de las abejas para la polinización, y las abejas obtienen alimento de las flores.
3. Plantas fijadoras de nitrógeno y leguminosas: Algunas plantas, como las leguminosas (guisantes, frijoles, alfalfa), tienen la capacidad de establecer una simbiosis con bacterias fijadoras de nitrógeno en los nódulos de sus raíces. Estas bacterias toman el nitrógeno atmosférico y lo convierten en una forma utilizada por las plantas. A cambio, las plantas proporcionan a las bacterias carbohidratos y un ambiente adecuado para su crecimiento. Esta simbiosis beneficia a las leguminosas al obtener nitrógeno adicional y beneficia a otras plantas en el entorno al enriquecer el suelo con nitrógeno.
4. Lombrices de tierra y suelo: Las lombrices de tierra tienen una relación simbiótica con el suelo. Las lombrices se alimentan de materia orgánica en descomposición, como hojas caídas y restos vegetales, en el proceso descomponen y mezclan el suelo, mejorando su estructura y aumentando su fertilidad. A su vez, las lombrices obtienen alimento y un hábitat favorable para su reproducción en el suelo.
Competencia: Aunque las interacciones positivas son deseables, también es importante comprender y gestionar la competencia entre las plantas. Algunas especies pueden competir por recursos limitados, como la luz, el agua y los nutrientes. Aprenderemos a manejar la competencia a través de técnicas como el espaciamiento adecuado, la poda selectiva y la elección de plantas que no compitan directamente entre sí.
ejemplos
La competencia en la permacultura se refiere a la interacción entre plantas que compiten por recursos como luz solar, agua, nutrientes y espacio. Aquí tienes algunos ejemplos de competencia entre plantas:
1. Malezas y cultivos: Las malezas son plantas no deseadas que compiten con los cultivos por recursos. Las malezas pueden crecer rápidamente y competir por luz solar, nutrientes y agua, lo que afecta negativamente el crecimiento y rendimiento de los cultivos. En un sistema de policultivo, es importante controlar las malezas para minimizar la competencia y permitir que los cultivos prosperen.
2. Plantas vecinas con requerimientos similares: Cuando se cultivan plantas con requerimientos similares en el mismo espacio, pueden competir por recursos limitados. Por ejemplo, si se cultivan tomates y pimientos juntos, ambos requieren una cantidad similar de luz solar y nutrientes, lo que puede generar competencia entre ellos. En estos casos, es importante considerar el espaciado adecuado y asegurarse de proporcionar suficientes recursos para cada planta.
3. Árboles y plantas de bajo crecimiento: En un sistema de agroforestería o silvopastoreo, los árboles proporcionan sombra y compiten por la luz solar con las plantas de bajo crecimiento en el suelo. Las plantas de bajo crecimiento deben adaptarse a condiciones de sombra parcial y pueden recibir menos luz solar directa debido a la competencia con los árboles.
4. Plantas trepadoras y plantas de bajo crecimiento: Las plantas trepadoras, como las judías verdes o las guías para enredaderas, pueden competir por espacio y luz con las plantas de bajo crecimiento cercanas. Las trepadoras pueden cubrir las plantas de bajo crecimiento y limitar su acceso a la luz solar. En estos casos, es importante proporcionar estructuras de soporte adecuadas para las trepadoras y asegurarse de que las plantas de bajo crecimiento tengan suficiente espacio para crecer.
Ciclos y sucesiones: La planificación adecuada de los ciclos de siembra y las sucesiones de cultivos es esencial para mantener la salud y la productividad a largo plazo. Estudiaremos la rotación de cultivos y la secuencia adecuada de plantas en un policultivo, considerando los requerimientos nutricionales, las enfermedades y las interacciones competitivas. Aprenderemos a diseñar secuencias de cultivos que optimicen la utilización de los recursos y reduzcan la acumulación de plagas y enfermedades.
Ejemplos de ciclos de nutrientes en un sistema de permacultura:
1. Ciclo del nitrógeno: El nitrógeno es un nutriente esencial para el crecimiento de las plantas. En un sistema de permacultura, se puede establecer un ciclo del nitrógeno eficiente utilizando abonos verdes, como la alfalfa a la vez que son plantas fijadoras de nitrógeno. Estas plantas capturan nitrógeno del aire y lo acumulan en sus tejidos. Luego, al ser cortadas y dejadas en el suelo como acolchado o compostadas, liberan el nitrógeno nuevamente al suelo, enriqueciendo y mejorando la disponibilidad de este nutriente para otras plantas.
2. Ciclo del carbono: El carbono es fundamental para el crecimiento de las plantas y la salud del suelo. En un sistema de permacultura, se puede implementar un ciclo del carbono mediante la incorporación de materia orgánica en el suelo a través de prácticas como la aplicación de compost, el uso de residuos vegetales como mulch y la utilización de técnicas de manejo del suelo que promuevan la retención de carbono. A medida que la materia orgánica se descompone, se libera dióxido de carbono al suelo, promoviendo su fertilidad y estructura.
Ejemplos de sucesión ecológica en un sistema de permacultura:
1. Sucesión de cultivos anuales a perennes: En un sistema de permacultura, se puede diseñar una sucesión de cultivos que comienza con plantas anuales de ciclo corto, como hortalizas, seguidas por plantas perennes como árboles frutales o arbustos. Esta sucesión permite aprovechar el espacio y los recursos disponibles, ya que las plantas anuales pueden ser cosechadas antes de que las plantas perennes se establezcan por completo. Además, las plantas perennes proporcionan una estructura estable y de largo plazo al sistema.
2. Sucesión de comunidades vegetales: En un sistema de permacultura, se puede fomentar la sucesión de comunidades vegetales para maximizar la diversidad y la resiliencia del sistema. Por ejemplo, se pueden establecer áreas con plantas pioneras que colonizan rápidamente un espacio desnudo y mejoran las condiciones del suelo. A medida que estas plantas pioneras establecen las condiciones adecuadas, otras especies más tolerantes pueden colonizar el área, creando una comunidad vegetal más diversa y estable.
3. Sucesión de bosque: En un sistema de permacultura inspirado en el bosque, se puede diseñar una sucesión que imite el desarrollo natural de un bosque. Comenzando con árboles jóvenes y especies tolerantes a la sombra, se puede permitir que el bosque se desarrolle a lo largo del tiempo, con la sucesión de árboles más altos, arbustos, plantas de sotobosque y enredaderas. Esta sucesión crea un ecosistema más complejo y diverso, con diferentes estratos y nichos ecológicos.
5. Estratificación: La estratificación de las plantas en diferentes niveles verticales dentro del policultivo permite un uso eficiente del espacio y la creación de microclimas favorables. Exploramos la selección de plantas que ocupan diferentes alturas, como árboles, arbustos, trepadoras y plantas rastreras. Aprendemos a aprovechar estas capas vegetales para proporcionar sombra, protección contra el viento, retención de humedad y hábitats para organismos beneficiosos.
se pueden considerar diversos estratos entre ellos los siguientes:
1. Estrato arbóreo: El estrato arbóreo se compone de árboles altos que proporcionan sombra, protección contra el viento y producen frutos o madera. Algunos ejemplos de árboles en este estrato podrían ser manzanos, perales, nogales o eucaliptos, dependiendo de las condiciones climáticas y la región.
2. Estrato arbustivo: El estrato arbustivo está compuesto por arbustos de menor altura que crecen debajo de los árboles. Estos arbustos pueden ser frutales, como arándanos o grosellas, o tener otras funciones como romero, lavanda o arbustos ornamentales. Proporcionan cobertura adicional y pueden ser utilizados para limitar el crecimiento de malezas y brindar hábitats para insectos benéficos y aves.
3. Estrato herbáceo: El estrato herbáceo se refiere a plantas de porte bajo, como hortalizas, hierbas culinarias y flores anuales. Estas plantas pueden cultivarse entre los arbustos y árboles, aprovechando los espacios libres y creando una mayor diversidad en el sistema. Ejemplos de plantas herbáceas pueden incluir tomates, lechugas, albahacas, caléndulas o tagetes.
4. Estrato rastrero o cubierta vegetal: El estrato rastrero o de cubierta vegetal está compuesto por plantas de crecimiento bajo que cubren el suelo y ayudan a controlar las malezas, reducir la erosión y conservar la humedad. Plantas como ajos silvestres, menta o trébol pueden ocupar este estrato, extendiéndose horizontalmente y cubriendo el suelo.
5. Estrato subterráneo: El estrato subterráneo se refiere a plantas que crecen bajo tierra, como tubérculos o bulbos. Ejemplos comunes son las patatas, zanahorias, cebollas o ajos. Estas plantas contribuyen a la estructura y fertilidad del suelo, además de ofrecer productos comestibles.
La estratificación en un sistema de policultivo permite aprovechar el espacio vertical y horizontal de manera eficiente, creando múltiples capas de vegetación que se benefician entre sí, proporcionando nichos ecológicos diversos y aumentando la biodiversidad en el sistema.
Al comprender y aplicar estas relaciones en nuestro diseño de policultivos, podemos crear sistemas agrícolas más resilientes, biodiversos y autosostenibles. Estas interacciones promoverán la estabilidad del sistema, reducirán la dependencia de insumos externos y fomentarán la salud del suelo y la diversidad biológica.
En el próximo capítulo, nos sumergimos en el proceso de diseño de policultivos, aplicando los conocimientos adquiridos hasta ahora para crear sistemas armónicos y eficientes desde una perspectiva permacultural.